Las precipitaciones «atípicas» que se registraron meses atrás en los alrededores de La Meca y Medina, afectaron por completo el desierto de Arabia Saudita. Según los meteorólogos en Emiratos Árabes Unidos (EAU), se trató un “acontecimiento excepcional” en la historia climática del país.
Arabia Saudita será el país anfitrión del Día Mundial del Medio Ambiente 2024, que se centrará en la restauración de la tierra, la desertificación y la resistencia a la sequía.

Un desierto que reverdece
El exceso de agua dio lugar a un fenómeno único. El desierto, tal y como lo conocemos cambió por completo. Ahora, su superficie toma un llamativo color verde debido a la presencia de pasto y plantas.

Este «verdor inesperado» ha sido capturado en imágenes satelitales y fotografías que circulan ampliamente en las redes sociales, generando asombro y comentarios sobre la capacidad de la naturaleza para adaptarse.
Si bien este reverdecimiento del desierto es un espectáculo natural llamativo, se trata de un fenómeno temporal. Las plantas que han brotado debido a la humedad reciente probablemente se marchitarán y morirán una vez que las condiciones climáticas regresen a la aridez habitual.
Arabia Saudita

El país, uno de los mayores emisores de gases de efecto invernadero del mundo, se enfrenta a serias amenazas derivadas del accionar humano que provoca el aumento de las temperaturas, la escasez de agua y la intensificación de eventos climáticos extremos como sequías e inundaciones.
El estudio «El crecimiento verde y sus consecuencias para la biodiversidad en ecosistemas áridos» (Wang et al., 2018) analiza los impactos potenciales del crecimiento verde en la biodiversidad de los ecosistemas áridos. Se define como el aumento de la cobertura vegetal en áreas áridas y semiáridas, puede ser impulsado por diversos factores, como el cambio climático, la deforestación o la reforestación.
Fuente: Agencias

