Mientras los líderes mundiales se reúnen en Nueva York, la lucha contra el cambio climático cobra un nuevo impulso. Esta Cumbre Climática 2025 de la ONU, aunque es un evento de un solo día, es el paso previo y decisivo hacia la COP30. Esta gran cumbre del clima se celebrará en noviembre en Belém, Brasil.
¿Qué es la Cumbre Climática 2025 y por qué es tan importante?
A diferencia de las largas negociaciones de la COP, esta cumbre climática 2025 en Nueva York busca ser directa. El objetivo es que los líderes de países, empresas y sociedad civil presenten planes concretos. Estos nuevos compromisos climáticos nacionales, llamados NDC, reflejan la acción que cada país promete realizar.
El mensaje del jefe de la ONU, António Guterres, es claro: los compromisos actuales son insuficientes. Solo una fracción de los países ha actualizado sus planes. Los objetivos vigentes apenas reducirían las emisiones globales en un 2.6% para 2030. Los científicos, en cambio, afirman que se necesita una reducción del 43%. Esta es una cifra necesaria para mantener el aumento de la temperatura global por debajo de 1.5 °C. Por eso, la cumbre climática 2025 es crucial para cerrar esa enorme brecha.ha.
Entre contrastes y desafíos: El panorama actual
La cumbre se desarrolla en un contexto lleno de contradicciones. Por un lado, la inversión en energías renovables ha alcanzado niveles récord. El año pasado, la inversión en energía limpia duplicó la de los combustibles fósiles, y la energía solar se ha vuelto un 41% más barata que su alternativa fósil más económica. Hay un impulso real en la transición energética.
Sin embargo, los desafíos son igualmente grandes:
- Realidad científica: El 2024 fue el año más caluroso registrado. Los desastres climáticos, como las inundaciones en Pakistán y las sequías en África, demuestran que el impacto ya está aquí.
- Realidad política: Países clave como Estados Unidos, uno de los mayores emisores históricos, se retiraron del Acuerdo de París y han limitado su apoyo financiero. Esto genera desconfianza y preocupación en las naciones en desarrollo.
Lo que se espera de esta cumbre

Los expertos vigilarán de cerca si los líderes cumplen con sus promesas en tres áreas clave:
- Planes ambiciosos: ¿Los principales países contaminantes presentarán nuevos compromisos que realmente logren reducir las emisiones?
- Financiamiento climático: ¿Se destinarán fondos significativos para ayudar a las naciones más vulnerables? El fondo de «pérdidas y daños», destinado a compensar a los países afectados, aún está lejos de tener los recursos necesarios.
- Compromiso real: ¿Los líderes reconocerán que seguir invirtiendo en carbón, petróleo y gas es incompatible con los objetivos climáticos?
Los resultados de esta cumbre no son negociaciones finales, pero sí marcarán la pauta para la COP30 en Belém. El éxito de la conferencia en Brasil dependerá de los compromisos anunciados esta semana en Nueva York.
Para la ONU, esta cumbre climática 2025 es una oportunidad para demostrar que la acción climática puede ser una fuerza positiva. Crea empleos, mejora la salud y fortalece la seguridad energética. Es un llamado a la acción para reconstruir la confianza global y pasar de las palabras a los hechos. Para muchas comunidades, el clima no es una oportunidad, es una cuestión de supervivencia.
Con información de Agencias.