La Fundación Heinrich Böll presentó recientemente el Atlas de la Amazonía Brasileña, una publicación colectiva escrita por líderes indígenas, quilombolas, ribereños, periodistas y académicos de la región.
El atlas ofrece una lectura crítica del territorio amazónico a partir de datos concretos, testimonios locales y análisis político. Su objetivo es reformular el enfoque predominante sobre la Amazonía, que históricamente ha estado marcado por intereses externos y una narrativa de ocupación y explotación.
Organizado en 32 artículos, el documento aborda problemáticas como la expansión del agronegocio, la minería ilegal, el avance de proyectos de infraestructura a gran escala y el impacto acumulado sobre comunidades, ecosistemas y derechos colectivos. Además, revela cómo la falta de regulación y el caos fundiario han creado disputas prolongadas en zonas rurales e indígenas.

Uno de los ejes centrales del atlas es la criminalización de defensores ambientales. Diversos textos documentan casos de persecución y violencia sistemática contra quienes denuncian prácticas extractivas ilegales o defienden los derechos territoriales. También se señalan procesos de militarización en áreas estratégicas, que refuerzan la presencia estatal desde una lógica de control más que de protección.
El atlas dedica parte de sus contenidos a fenómenos menos visibles, como la erosión lingüística de los idiomas indígenas, los desafíos de la Amazonía urbana o las migraciones forzadas por la pérdida de medios de vida tradicionales. A pesar de la diversidad temática, el hilo conductor es claro: los autores denuncian un modelo de desarrollo impuesto desde fuera del territorio, que prioriza la renta económica sobre la sostenibilidad socioambiental.
Para el coordinador del área de Justicia Socioambiental de la Fundación Heinrich Böll en Brasil y coorganizador del atlas, Marcelo Montenegro, la publicación también busca corregir la visión reducida que presenta a la Amazonía como una región exclusivamente selvática.
“Poco se sabe que el 75% de la población de la Amazonía es urbana. Hay pueblos y comunidades que desde hace mucho tiempo trabajan en relación con la naturaleza, con formas de protección y preservación ambiental, construyendo un buen vivir cada vez más sostenible. Es necesario dar protagonismo a quienes están en los territorios en estos debates”, afirmó Montenegro.

Captura del Atlas de la Amazonía Brasileña
Evidencia reciente de la crisis socioambiental en la Amazonía
En 2023, la Amazonía brasileña enfrentó eventos que evidenciaron la profundidad de su crisis humanitaria y ecológica. Uno de los casos más notorios fue la emergencia vivida por el pueblo indígena Yanomami, cuyo territorio había sido invadido años atrás por operaciones de minería ilegal. La situación derivó en desnutrición masiva, colapso sanitario y muertes evitables, lo que generó repercusiones internacionales.
Ese mismo año, la región fue golpeada por una intensa sequía: los ríos alcanzaron niveles históricamente bajos, provocando mortandad de fauna, escasez de agua potable y alimentos, y afectaciones severas en la infraestructura fluvial, clave para la movilidad y el abastecimiento de comunidades.
Los impactos no se limitaron a 2023. En 2024, otra sequía afectó nuevamente la región, coincidiendo con un récord de focos de incendio en el bioma amazónico, el mayor en los últimos 17 años. El humo generado deterioró la calidad del aire y comprometió la salud de miles de personas, incluso en estados alejados del foco, como los del Centro-Oeste, Sudeste y Sur de Brasil.
Otros biomas que integran la Amazonía Legal, como el Pantanal y el Cerrado, también registraron cifras récord de incendios durante ese periodo, reforzando la alerta sobre la intensificación de los eventos extremos en el país.

Foto © ReutersUeslei Marcelino
Presentación en contexto de la COP30
La publicación fue presentada en el contexto preparatorio de la COP30, que se celebrará del 10 al 21 de noviembre de 2025 en Belém, capital del estado de Pará, Brasil. Será la primera vez que una ciudad amazónica reciba la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, lo que posiciona a la región como actor central en los debates globales sobre mitigación, adaptación y financiamiento climático.
En ese sentido, el atlas no sólo cumple una función informativa, sino que busca incidir en la agenda internacional con evidencia directa desde los territorios amazónicos.
La versión digital del atlas está disponible en portugués y puede descargarse de manera gratuita desde el sitio oficial de la Fundación Heinrich Böll. La iniciativa forma parte de un esfuerzo más amplio por fortalecer el protagonismo amazónico en el debate ambiental, no como objeto de protección, sino como sujeto político.