La mega planta fotovoltaica marca una transición del uso exclusivo de combustibles fósiles hacia un modelo de energía renovable y autosustentable.
Esta instalación, conocida como Cauchari, situada en la puna jujeña, cuenta con más de 900.000 paneles solares que cubren 600 hectáreas en la localidad de Susques, a aproximadamente 4.200 metros sobre el nivel del mar.
Además de proporcionar energía limpia, el proyecto generará empleo local, contribuyendo así al desarrollo económico de la región. Respaldada por una inversión considerable, que incluye préstamos internacionales y el apoyo del gobierno argentino, la planta está compuesta por tres estaciones: Cauchari I, II y III, las cuales estarán operativas para inyectar energía en el sistema interconectado del país.

El sol de Jujuy, conocido por su intensa radiación solar, será aprovechado a través de estos paneles para generar 300 megavatios de energía limpia, lo que permitirá abastecer a más de 100.000 hogares. Este avance constituye un cambio significativo en la matriz energética de la provincia, marcando una transición del uso exclusivo de combustibles fósiles hacia un modelo de energía renovable y autosustentable.

La planta fotovoltaica de Cauchari constituye un hito no solo para Argentina, sino también para toda Sudamérica. Su inauguración marca un paso significativo hacia un futuro más sostenible, en consonancia con los compromisos globales en materia de energía limpia y descarbonización.
El impacto ambiental positivo de la planta Cauchari es innegable. La disminución de las emisiones de gases de efecto invernadero, resultado de la generación de energía limpia, representa un avance significativo en la lucha contra el cambio climático.