El Día de la Sobrecapacidad de la Tierra, también conocido como Día de la Deuda Ecológica marca la fecha en la que la demanda de recursos y servicios ecológicos de la humanidad en un año concreto supera lo que la Tierra puede regenerar en ese año. En términos económicos sería como agotar el saldo disponible y entrar en números rojos, tal como lo explica WWF.

El día en que entramos en déficit ecológico
Este día es calculado por la Global Footprint Network, una organización de investigación internacional que ofrece a los tomadores de decisiones un menú de herramientas para ayudar a la economía humana a operar dentro de los límites ecológicos de la Tierra, analizando la evolución mundial de dos parámetros: la biocapacidad (o capacidad de regeneración biológica) y la huella ecológica (nuestra demanda de recursos).
Cómo se calcula el Día del Sobregiro mundial
Global Footprint Network, mide la huella ecológica de los países para comparar la demanda de recursos de individuos, gobiernos y empresas con la capacidad de regeneración de la Tierra. Si bien el Día del Sobregiro es mundial, no todos los países consumen la misma cantidad de recursos al año. Por lo que, hay naciones como Estados Unidos que consumen hasta 5 veces los recursos del planeta en un solo año.
En el lado opuesto, si fuera por el consumo de países como la India, este día no existiría, ya qye consume aproximadamente 0.7 planetas al año. En este sentido, en 2023, países como Qatar consumieron todos los recursos disponibles en febrero, a solo dos meses de que comenzara el año. Países con menor tasa de consumo como Ecuador, acabaron con los recursos disponibles a finales de noviembre del mismo año.

Un cambio de modelo: hacia la sostenibilidad
El Día de la Sobrecapacidad nos recuerda que el modelo actual de producción y consumo es una de las principales causas de la crisis climática y la destrucción de la naturaleza. Con lo que cada persona aporta a nivel personal no será suficiente. Por lo que debe darse un proceso a gran escala para cambiar la forma producir alimentos y energía, los grandes causantes de la emergencia climática. Se debe promover una recuperación económica sostenible, que respete los límites del planeta y reduzca la huella ecológica de la humanidad.

