En la costa atlántica del departamento de Rocha se encuentra el Paisaje Protegido Laguna de Rocha. Este santuario natural abarca unas 22.000 hectáreas, que incluye las 7.200 hectáreas de cuerpo de agua, lomadas, llanuras, la franja costera y parte de la plataforma oceánica.
La laguna se comunica con el océano Atlántico de manera periódica a través de un sistema de apertura y cierre de la barra arenosa. La baja profundidad de la laguna y la mezcla de aguas marinas y continentales generan un ambiente propicio para el desarrollo de una notable biodiversidad.
Está ubicada al sur del departamento de Rocha (Uruguay), en ella viven una gran cantidad de aves autóctonas y migratorias. Motivo por el que fue declarada “Reserva de Biósfera”. Se destaca por sus especies de aves, mamíferos y vegetación. La Laguna de Rocha forma parte del Sistema Nacional de Áreas Protegidas de Uruguay en calidad de «paisaje protegido».
Desde 2015, integra el listado de humedales con relevancia internacional que elabora la Convención Ramsar. Es de una belleza impactante por su inmensidad, sus plácidas aguas y la variedad de paisajes que presenta. Desde hace 70 años existe una comunidad de pescadores artesanales en la zona de la barra, que vive de la explotación de los recursos acuáticos del lugar.
En los campos que rodean la laguna hay explotaciones agropecuarias que desarrollan una ganadería pastoril tradicional constituyéndose esta forma productiva en uno de los elementos determinantes para el buen estado de conservación de toda el área. El área tiene además un destacado potencial para el turismo de naturaleza.

Usos y actividades económicas
El uso del suelo más extendido es el pastoreo para ganadería, que generalmente favorece el hábitat de las aves playeras de pastizal. La pesca es abundante y un grupo importante de familias de pescadores artesanales la lleva a cabo, destacándose la pesca de crustáceos como camarón y cangrejo azul o sirí, y peces como lenguado, corvina negra y blanca, lacha y pejerrey. El turismo durante el período estival es intenso, particularmente desde el cercano y atractivo balneario La Paloma, cuyas playas y belleza paisajística atraen miles de turistas de muchas nacionalidades.
Problemas que la zona presenta
La presión inmobiliaria sobre la zona es muy alta, dada su cercanía a La Paloma, tradicional balneario del departamento de Rocha. Entre otros impactos negativos se observan la densificación de la urbanización, el aumento del uso de la laguna para actividades turísticas y deportivas, El aumento de cultivos intensivos como el arroz con los agroquímicos asociados, el tránsito de vehículos motorizados sobre dunas, playas y costa de la laguna, la tala de vegetación nativa. Todo esto redunda en la reducción de hábitats para la avifauna y fauna en general.

(En base a información Ministerio de Ambiente e Intendencia de Rocha)

